La Rosa Escondida

En una calle desierta
de cualquier ciudad perdida,
sueña el bosque que despierta
con los árboles dormidos.

Con cada árbol, un alma.
En cada alma, su aliento.
Con el aliento, un suspiro.
En cada suspiro, un beso.
Con cada beso, una nube.
En cada nube, la lluvia.
Con la lluvia, cada lágrima.
En la lágrima, una rosa.
Con cada rosa, una espina.

Yo, con los ojos abiertos
soñaré que me he dormido
y que has entrado en mi sueño
y que has soñado conmigo
Rozarán mis labios tu beso
y será mi beso un suspiro.
Y pondré una rosa en tus lágrimas.
Una rosa sin espinas

Soñaré en las calles sin nombre
de cualquier ciudad perdida,
el bosque que duerme,
el árbol que sueña,
la rosa escondida.

© Caminante 2011