árboles dormidos © Caminante 2010
Si alguna vez tan triste te parezco
que me ves como a un árbol ya dormido,
con las ramas desnudas del olvido
trenzando la tristeza que padezco.
Si alguna vez mi llanto yo te ofrezco
con el agua de lluvia confundido...,
pregúntale a la nube si me he ido
a ese lugar a donde pertenezco.
No le busques motivo a mi tristeza.
No le busques razón al desatino.
Una nube pasó por mi cabeza,
nubló por un instante mi destino.
Más la luz de la luna me da fuerza.
Alumbra cada noche mi camino.
© Caminante 2010